sábado, 10 de marzo de 2012

La Escuela 503, la obra no avanza hace mucho tiempo

Pero esas denuncias no se agotan sólo ahí, porque los vecinos de Ezeiza también quieren hacer oír sus reclamos por la falta de obras para las escuelas. Por caso, apuntaron que en la intersección de las calles Moreno y Farina, frente a la cancha de Tristán Suárez, hay un colegio para chicos con capacidades diferentes que “nunca se terminó de hacer”.

Se trata de la Escuela 503, cuyas obras duermen el sueño de los justos hace más de dos años. “Hacen refacciones a la cancha, pero el edificio no se termina. Y lo que falta son justamente edificios -precisaron-. Hay escuelas que tienen Primaria, Secundaria, cursos para adultos y COA, todo en un solo lugar”.

Crece el escándalo en el Consejo Escolar de Ezeiza por las denuncias de “favoritismos políticos”

Las denuncias por “favoritismos políticos” en el Consejo Escolar de Ezeiza desataron un escándalo en el distrito. La semana pasada, este portal dio cuenta de las acusaciones contra la presidenta del cuerpo, Graciela Morellini, y la tesorera, Silvia Carnero, por “tener a sus hijos, sobrinos y demás familiares como auxiliares” cuando “hay gente que está anotada hace diez años y no consigue un puesto”.

Aunque anónimas, las denuncias apuntan a supuestos “ñoquis” que “están cobrando sueldos del Estado de hace más de medio año pero no se presentan a trabajar”, además de que “los cargos son para los punteros, barrabravas de la cancha de Tristán Suárez y del municipio”.

El reclamo al intendente Alejandro Granados fue ampliado ahora a la “falta de infraestructura y mantenimiento” en las escuelas, porque “se necesita mobiliario y material de trabajo para los auxiliares, y se está ignorando lo que establece la ley 10.430”.

Fuentes del Consejo Escolar de Ezeiza señalaron a NOVA que “el directivo de cada escuela debe tramitar las cosas que faltan”, y repudiaron algunas prácticas llevadas a cabo en la cocina como “fumar cigarrillos mientras se prepara la comida”. Además, apuntaron a los cocineros por “no tener cursos de cocina y no usar gorro, chaqueta ni manoplas”.

Esas mismas fuentes, que prefieren el anonimato, señalaron que “los protegidos, los punteros y los sobrinos políticos de Morellini siguen haciendo de las suyas, con sus puestos de trabajo en la vía pública, y siguen percibiendo sus haberes y subsidios”. Revelaron también que “encima, como premio, les entregan viviendas”.

“Hay gente que está en el Consejo desde el año 2003, y jamás fue a una escuela. Los ñoquis son una tonelada -denunciaron-. No nos explicamos cómo puede haber tanta gente. Figuran en una escuela pero no ejercen los cargos”. En ese sentido, desde el Consejo acusaron a la presidenta del cuerpo, Graciela Morellini, porque “en cada escuela tiene sus buchones”.

“En la Escuela 503 no se movió ni un solo ladrillo, el único movimiento que se ve en Tristán Suárez es en la cancha”, concluyeron. via Agencia Nova