En los próximos días, abrirán una sala de tragamonedas –que fue trasladada desde Villa Gesell- en un shopping inaugurado en 2008 por Néstor y Cristina Kirchner. Sospechan que el bingo es un premio que le dio el kirchnerismo al actual ministro de Seguridad
Cuando el año pasado, el intendente de Ezeiza, Alejandro “El Sheriff” Granados, aceptó pedir una licencia como jefe comunal del municipio que conducía desde 1995, mucho se comentó que una de las monedas de cambio que habría exigido para asumir como ministro de Seguridad era que le hicieran realidad un viejo anhelo: tener una sala de bingo, con tragamonedas, en su pago chico.
Varios intentos, en ese sentido, habían resultado infructuosos. Pero el hombre duro de Ezeiza no sólo llama la atención por sus prominentes mostachos. También se caracteriza por su insistencia, y más cuando el negocio del juego es considerado como uno de los principales mecanismos de financiamiento que tiene la política: las tragamonedas de los 44 bingos bonaerenses mueven alrededor de $10.000 mil millones al año.
A fines del año pasado, Granados tuvo el aval de la Provincia y del kirchnerismo. Y por eso la empresa Binbaires, la misma que desde el año 2010 regentea el Bingo de Los Polvorines, estrechamente vinculada con el zar kirchnerista del juego Cristóbal López (a quien Kirchner le entregó en bandeja el manejo del Casino Flotante de Puerto Madero y las tragamonedas del Hipódromo de Palermo), decidió trasladar la sala de Villa Gesell a Ezeiza. El cambio, por el momento, no sería permanente: en principio funcionaría de marzo a noviembre, período en que permanecería cerrada en la localidad de la Costa Atlántica.
La licencia de bingo trasladado estará en manos del Club Tristán Suarez (milita en la “B” metropolitana) que, no por casualidad, tiene como presidente a Gastón Granados, hijo del ministro de Seguridad. Este club, el año pasado, durante un partido de la Copa Argentina frente a Racing Club, usó una remera con el rostro de Néstor Kirchner. Al tener la licencia, el club no solamente es el encargado de tercerizar la explotación de las tragamonedas, que en este caso estará a cargo de BinBaires, sino que también recibe un porcentaje de lo recaudado.
Eso sí, no vayan a creer estimados lectores que el juego le significa algún tipo de progreso para la comuna que habilita el funcionamiento de las tragamonedas: por una polémica ley, sancionada durante el gobierno de Felipe Solá, los bingos están exentos del pago de tasas.
A su vez, como las tragamonedas son aparatos programados para hacer perder, que nada tienen de azar, el negocio –que suele estar abierto las 24 horas- es una enorme aspiradora de recursos, que termina esquilmando las economías regionales. De ello pueden dar cuenta en Villa Gesell, cuyo intendente acaba de decretar la emergencia económica del municipio. Allí, además de una dura contienda política entre el oficialismo y la oposición, hubo crecientes denuncias del comercio local debido a que, cuando terminaba la temporada de verano, el bingo absorbía prácticamente todos los ingresos destinados a divertimiento de los residentes permanentes. Este sería un factor que habría sido determinante para que las arcas del municipio de la Costa Atlántica, que se alimentan de las tasas que pagan los vecinos y comerciantes, ahora estén en rojo.
“BinBaires” comenzaría a funcionar en las próximas semanas en el shopping “Las Toscas”, un centro comercial de Ezeiza inaugurado por Néstor y Cristina Kirchner en el año 2008 y que se encuentra a escasos 300 metros de “El Jagüel”, una de las barriadas más humildes de Esteban Echeverría, el municipio vecino. De ahí que, muchos referentes del comercio local, afirmen que se quiere aprovechar el actual contexto de crisis para hacer negocios no del todo claros. Está demostrado que, en épocas de recesión como la que estamos viviendo, aumenta el número de personas que, en su desesperación por salvarse, recurre a las maquinitas. Y las consecuencias son muy serias: suicidios, familias que terminan en la ruina, etc.
El nuevo bingo se pudo instalar gracias a una suerte de vacío legal que existe en la normativa vigente, que permite trasladar salas de juego, de un municipio a otro, sin ningún tipo de autorización por parte de la Legislatura. Sólo basta una resolución del Instituto de Loterías bonaerense, y la habilitación del municipio
En la inauguración de las “Las Toscas” también estuvo Diego Armando Maradona que, en varias ocasiones, distintos trascendidos lo ligaron empresarialmente con el emprendimiento comercial.
VIA dIARIO HOY