Tras una serie de rigurosos trabajos de ingeniería, dirigidos por un grupo de expertos, fue reparado íntegramente el puente Victorino de la Plaza, una verdadera reliquia histórica. La obra de Vialidad Nacional demandó una inversión aproximada de 3.800.000 de pesos.
El puente sobre el Riachuelo, que comunica el barrio porteño de Barracas con el partido de Avellaneda en el sur del Gran Buenos Aires, fue inaugurado el 1° de marzo de 1916 y, como homenaje, lleva el nombre del ex presidente que gobernó la Argentina entre 1814 y 1916.
Las tareas realizadas implicaron la reparación estructural, de estribos y pilares, pintado de la estructura metálica en el color naranja internacional y la readecuación total de la iluminación del puente y de los accesos.
La reconstrucción no fue fácil ya que tiene pilares y estribos de mampostería que están apoyados en cilindros de hormigón y pilotes de madera. Su estructura metálica está dividida en tres tramos: los dos de la puntas tienen una longitud de 19,50 metros cada uno y el central de 25,50. El ancho de la calzada es de 12,40 metros, con dos carriles.via: Clarin
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